En tan solo 2 horas llegamos a El Chaltén. La entrada al pueblo es imponente. O mejor dicho, tener al monte Fitz Roy a tan pocos metros te asombra constantemente. En esta foto pueden verlo claramente.
Allí pasaríamos 5 noches, de las cuales hemos dormido en una habitación para 6 personas. Pero con 6 compañeros de Israel. Es decir, nosotros 3 + 3 israelíes “legales” + otros 3 israelíes que dormían en el piso. Por suerte (o a la cuarta y quinta noche por desgracia), no usaban el único baño que teníamos. Nunca se bañaron…
A El Chaltén se la llama capital del trekking. Tiene muchos circuitos para caminar y sorprenderte. El primero, y más largo, que hicimos fue llegar a la Laguna de los 3 y a la Laguna Sucia. Ambas, agradecidas al deshielo constante del Glaciar de los 3 y al Glaciar Río Blanco, respectivamente. Son 4 horas de caminata donde la última es en subida. Es difícil pero para nada imposible. Eso sí, no vayan muy cargados porque van a sufrir un poco jaja.
Otro punto de inflexión en el viaje. Llegar ahí. Cómo puede ser que una “simple” laguna y un glaciar generen tanto. Los desafío a que hagan la prueba. Se siente maravillosamente bien vivir ese ambiente de calma; respirás paz. Considero que la tranquilidad y la paz realzan cada rincón de la naturaleza. Aquí dos imágenes para que viajen un ratito.
Al lado de éste, se encuentra la Laguna Sucia, que de sucia no tiene nada, claro está. A diferencia de la Laguna de los 3, que tiene un hermoso color turquesa, la Laguna Sucia obtiene del Glaciar Río Blanco, un verde intenso. Muy pocos metros de distancia, dos colores bien distintos, y tan extraordinarias.
Otro de los días fuimos hacia la Laguna Torre, otro producto del deshielo. En este caso, del Glaciar Torre. Luego de un trekking de 2 horas, llegás al sitio donde hay vientos de 100 km/h. Real. Lo viví. Y también; el lugar con los bloques de hielos más grandes y cerca. Impactante.
La aventura “Chaltén” termina yendo a escalar al Glaciar Viedma. Nos habíamos quedado con ganas de escalar en el Perito Moreno. Habíamos desistido por el precio. Una estupidez. ¡Vayan! Después te arrepentís y ya no hay vuelta atrás. Nosotros contratamos el tour para el Glaciar Viedma. Fue un día completo; hermoso y novedoso. Escalar en un glaciar. Experiencia inolvidable. ¿Cuándo volveré a hacerlo? Nunca se sabe. La vida son momentos y experiencias, y ese día ocupa un lugar en el rincón de las experiencias. No hay mucho para detallar. Consejo: por más frío que haga, el sol pega y fuerte. Lleven protector solar y anteojos de sol.
En resumen, este bello y mágico pueblo ofrece una amplia diversidad natural para jamás dejar de visitarlo!
Próxima estación: Río Gallegos.
Pingback: El Calafate | Próxima estación 365
Inolvidable el Chaltén! Si sabré eso de sufrir por el peso en las caminatas….
Me gustaLe gusta a 1 persona
Pingback: Sur argentino en auto | Próxima estación 365